La Playa de Antunes es un lugar muy bien conservado gracias a su ubicación junto a las piscinas naturales de Maragogi,  un destino que rápidamente está ganando su merecida reputación como el “Caribe brasileño”.

Otra gran sorpresa que nos guarda este destino es la posibilidad de acceder a las piscinas naturales de Antunes durante la marea baja. Cuando las aguas son lo suficientemente bajas, es posible llegar caminando a los corales y bucear entre la vida marina de la región. Para llegar allí, se debe cruzar el banco de arena y caminar unos kilómetros mar adentro. Para llegar también es posible alquilar tablas de stand up o kayaks y remar hasta allí.

Aunque hay muchas cosas para hacer, el plan insuperable es: encontrar una buena sombra y relajarse a la orilla del mar. Debido a que aún no está muy desarrollado, la infraestructura local es muy simple. No hay bares o restaurantes grandes, sin embargo, puede encontrar fácilmente puestos y vendedores locales.